El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Yucatán orienta sobre la resistencia a la insulina, ya que es una afección grave que suele manifestarse con el deseo compulsivo de comer cada 2 o 3 horas, en especial alimentos dulces, además de generar oscurecimiento del cuello (acantosis) y cansancio crónico o incluso dolor en las articulaciones.
La especialista en Endocrinología del Hospital General Regional (HGR) No. 1, doctora Araujo Méndez Adlemy de Jesús, explicó que la insulina es una hormona que genera el organismo para ayudar a que la glucosa (azúcar) en la sangre entre a las células de los músculos, grasa e hígado, donde se usa para obtener energía. Por lo tanto, la resistencia a la insulina consiste en el funcionamiento inadecuado de esta hormona, lo que genera que las células no pueden absorber la glucosa de la sangre fácilmente, generando un deterioro en el rendimiento del organismo.
“Cabe señalar que, las personas que presentan esta afección no tienen escasez de insulina, lo que pasa es que su cuerpo, no aprovecha la cantidad y calidad adecuada de insulina; es decir, que su organismo no puede absorber la glucosa (azúcar) requerida para un funcionamiento óptimo”, agregó la doctora Méndez Adlemy.
En la mayoría de los casos no genera síntomas, por lo que, esta afección suele detectarse durante un examen de salud anual o, a través de un análisis de sangre de rutina; sin embargo, hay algunos pacientes que llegan a registrar un deseo compulsivo de comer cada 2 o 3 horas, en especial alimentos dulces; sensación de hormigueo en manos o pies, cansancio recurrente y constante; de igual forma, presentan oscurecimiento de la piel en la axila o en la parte posterior y lados del cuello, una afección llamada acantosis nigricans.
Algunos factores que ocasiona que la probabilidad de desarrollar resistencia a la insulina aumente son: tener sobrepeso u obesidad, edad de 45 años o más; tener padre/madre, hermano o hermana con diabetes; inactividad física, el embarazo y el consumo de ciertos medicamentos como los corticoesteroides, al igual que quistes ováricos.
“Es fundamental que, para prevenir complicaciones en la salud, así como la presencia de resistencia a la insulina se considere que, aunque hay factores de riesgo que no se pueden cambiar como, por ejemplo: el historial familiar, la edad o el grupo étnico, existen otros que sí se pueden modificar y que pueden hacer una buena diferencia, como son los estilos de vida relacionados con la alimentación, la actividad física y el peso, además de intentar reducir el estrés”, afirmó.
Sin esta afección no recibe atención médica, puede desencadenar otras complicaciones como diabetes; por lo tanto, el IMSS en Yucatán cuenta en sus Unidades de Medicina Familiar con tratamientos y médicos para dar seguimiento a este tipo de diagnósticos o, en caso de ser requerido, canalizar a los pacientes al segundo nivel de atención.
De igual forma, se cuenta con estrategias educativas para orientar a las personas sobre recomendaciones de autocuidado que permiten reforzar su salud. Además, están los Módulos PrevenIMSS, donde se otorgan chequeos médicos preventivos, de lunes a viernes, de 8:00 a 20:00 horas, con la finalidad de evitar complicaciones o lograr detecciones oportunas.
Finalmente, se exhorta a la población para que, en caso de registrar un deterioro en la salud, acudan con el médico y no se automediquen, así como reforzar la práctica de hábitos saludables.