Nueva York.- El gigante aeroespacial y militar estadounidense Lockheed Martin presentó esta semana un nuevo diseño de avión supersónico, todavía en etapa conceptual, que será prácticamente silencioso, informaron fuentes locales.
El nuevo diseño presentado por Lockheed Martin Aeronautics es, según expertos militares, el «indicio más claro de que estamos al borde de una nueva era dorada de viajes aéreos súper rápidos».
El Quiet Supersonic Technology Airliner, un elegante avión de doble motor que transportará hasta 40 pasajeros a velocidades de Mach 1.8, fue revelado al mundo en una conferencia del Instituto Americano de Aeronáutica y Astronáutica en Dallas, Texas.
Aunque aún está lejos de ser construido, el diseño aprovecha el trabajo de Lockheed Martin (LM) con la NASA para crear el X-59 Quiet SuperSonic Technology, con un chorro supersónico que no provocará el intenso ruido típicamente asociado con los aviones que rompen la barrera del sonido.
Vale recordar que el fuerte ruido creado por el Concorde cuando cruzó el umbral de velocidad Mach 1 fue uno de los motivos que impidieron que la aeronave operara en atravesando territorios y no solo en vuelos transatlánticos, reduciendo en gran medida su viabilidad económica.
Esto promete cambiar con el nuevo avión supersónico de Lockheed Martin, que asegura que hay pruebas en curso con el X-59 que podrían allanar el camino para un replanteamiento de las regulaciones que impiden estos vuelos por tierra.
Mike Buonanno, ingeniero aeroespacial de LM, informó que la tecnología podrá avanzar una vez que el concepto se haya probado en el programa X-59 de la NASA.
«En este momento, solo hemos realizado estudios tempranos de diseño conceptual para establecer que el diseño es factible, evaluar el concepto, qué tan grande debería ser y cuánto debería pesar», explicó a CNN Travel. «Son estudios tempranos de sensibilidad para asegurarnos de que todo esté bien. Tiene sentido».
El QSTA no es el único nuevo avión comercial supersónico de pasajeros en el tablero de diseño en este momento. La nueva empresa estadounidense Boom Supersonic recibió una inversión de 10 millones de dólares de parte de Japan Airlines y, según informes, docenas de pedidos anticipados para su previsto jet de 55 asientos capaz de alcanzar una velocidad de Mach 2.2.
Sin embargo, deben seguir trabajando en la cuestión del sonido, debido a que las restricciones en vigencia le imposibilitarán operar en rutas por sobre tierras que lo hagan viable económicamente.
El diseño de Lockheed Martin recuerda al del aladelta de Concorde, pero en su lugar utiliza una nariz súper afilada para esculpir las ondas de choque sónicas que fluirán a lo largo del avión sin la explosión creada por su antepasado aeronáutico.
Los expertos aseguran que, si el trabajo en el X-59 se logra con éxito, el ruido debe ser audible desde el suelo sólo como un golpe similar al de una puerta de un automóvil que se cerró de golpe.
Fuente: El Periódico
