Mérida, Yucatán, 14 de noviembre de 2019.- Al quedar aprobado por unanimidad el proyecto de dictamen para reformar la Ley de Transporte de Yucatán, los usuarios del transporte público pasarán a ser la prioridad, logrando con ello un servicio con seguridad, eficiencia e igualdad.
Luego de diez meses de haber sido presentada la iniciativa por las diputadas Silvia López Escoffié y Milagros Romero Bastarrachea, de la fracción parlamentaria de Movimiento Ciudadano, hoy en la sesión de la Comisión de Desarrollo Urbano, Vivienda e Infraestructura, sometió a votación la iniciativa al considerarla suficientemente analizada y reconocer que busca erradicar gradualmente una problemática que se padece cotidianamente por muchos de los usuarios del transporte público.
Con las reformas que ya se han aprobado se reconocerá y garantizará los derechos de los usuarios, asegurando el respeto a este derecho a través de disposiciones sancionadoras que busquen, más que inhibir conductas, incentivar acciones que redunden en una nueva cultura caracterizada por un servicio público de transporte de calidad.
Se reconoció que los usuarios tienen derecho a recibir el servicio en forma regular, continua y permanente en condiciones de seguridad, comodidad, higiene, respeto e igualdad. Cualquier persona puede hacer uso del servicio de transporte previo pago de la tarifa autorizada.
Con las reformas se establece que los usuarios tienen derecho a que se respete la solicitud del servicio cuando se haga en el paradero establecido, recibir su boleto con seguro para viajero, el vehículo debe cubrir todo el recorrido por la ruta autorizada, a la seguridad de la frecuencia de los autobuses en los horarios autorizados, a viajar con un menor de cinco años sin que este pague boleto, a ser tratado con cortesía, abordar completamente el camión antes de que el operador lo ponga en movimiento.
Así también a recibir el servicio en vehículos limpios, que cuenten con bancas en buen estado, a que se le respeten las tarifas autorizadas, incluyendo las preferenciales para estudiantes, adultos mayores y personas con discapacidad, a no ser discriminado por razones de edad, género, condición económica o aspecto físico.
Quienes no cumplan con las nuevas medidas impuestas serán sancionados con el retiro de las unidades de transporte, multas económicas y suspensión o revocación de la concesión o permiso.
Así también se marcan obligaciones a los usuarios entre estas no ocupar los espacios designados a personas con alguna preferencia por género, edad o discapacidad, no insultar, no ingerir bebidas alcohólicas, substancias psicotrópicas o enervantes, no realizar actos contra la moral o contra la seguridad de otros usuarios, no tirar basura, no dañar los asientos. En caso de no respetar estas disposiciones el operador podrá bajar del vehículo al usuario.