A pesar de la fuerte contingencia y el brote de Covid-19 en el mundo entero, en Yucatán, siguen trayendo importaciones de Turquía, Egipto y otros países generando gran enojo y molestia en ciudadanos, ya que además de generarse una fuerte polémica por la dudosa calidad del producto, ponen en riesgo la salud de los Yucatecos y el comercio local.
Esto, es parte culpa del entonces presidente de la canadevi Armando Valencia que dio oportunidad al empresario regiomontano Ricardo Alesso, quien dice vender frutas y legumbres en Muna pero en realidad se dedica a la importación de cemento foráneo y que además ocupa transporte de fuera para sus fletes desde el puerto progreso a su bodega, pues han sido tantas las qiejas de diversos sectores del gremio del transporte donde a raíz de fuentes informativas como la jornada Veracruz, se habla de diversos escándalos de dicho empresario.
La reciente queja, fue de integrantes del Sindicato de Transportistas de Contenedores y Carga en General, en voz de quien dijo llamarse Javier Cahuich Petun, quien manifestó que este empresario prefiere traer empresas foráneas para mover sus cargamentos de cemento cuando llega su barco, dejando sin trabajo a las empresas locales de Progreso agremiados.
Cahuich Petun, dijo que cuando se deberían beneficiar de los movimientos que hay en el puerto para los locales, estas personas son capaces en todo sentido, desconociendo la razón de trasfondo para no ser considerados e incluso desdeñados por el poderoso empresario regiomontano.
Lamentablemente todo esto causa un riesgo latente en la salud y el progreso del comercio local en Yucatán, pues en estas instancias ni siquiera son gente de mismo estado que se está beneficiando pues Ricardo Alessio quien está siendo investigado en Veracruz por el órgano de fiscalización superior del estado de Veracruz y hoy se refugia en Yucatán haciendo negocios con extranjeros incluyendo al nuevo presidente de la Canadevi.