Como una respuesta para apoyar a las familias y actividades productivas del País, los Diputados Federales del PRI de Yucatán, Dulce María Sauri Riancho, Juan José Canul Pérez y María Ester Alonzo Morales, presentaron un Punto de Acuerdo para Exhortar a la Comisión Federal de Electricidad, para que:
- Publique las medidas que implementará en apoyo de la ciudadanía para evitar cortes del servicio eléctrico que pongan en riesgo la vida, la salud y la seguridad de las personas que por falta de recursos no puedan realizar los pagos correspondientes y;
- Para que implemente las medidas necesarias que permita diferir los pagos por suministro de energía eléctrica, y en su caso, considerar la viabilidad de reducir o eliminar el pago de los mismos, dada la actual contingencia nacional que se vive en el país.
Con este Exhorto, esperan que el Gobierno Federal sea sensible a la situación económica en que se encuentran las familias mexicanas y actué con responsabilidad procurando el bienestar de las y los mexicanos ante la Contingencia Sanitaria del COVID-19.
Al respecto la diputada federal, María Ester Alonzo Morales, resaltó que actualmente nos encontramos en un escenario muy complejo por los diversos efectos que ocasionan en nuestra vida la pandemia del coronavirus COVID-19.
Dijo que afrontar esta contingencia sanitaria no es un tema sencillo, sobre todo en el cumplimiento del aislamiento social como medida de cuarentena, sobre todo cuando muchas personas viven con recursos económicos generados por su trabajo diario, quedarse en casa representa no contar con un ingreso y por lo tanto se ven obligadas a salir a laborar.
Alonzo Morales añadió que, por otro lado, aquellas personas que pueden realizar dicha cuarentena requieren trabajar desde sus casas como un mecanismo que les permitan continuar con sus responsabilidades laborales. Lo anterior, sin duda alguna ha tenido un efecto en la economía local y nacional, siendo las pequeñas y medianas empresas las más afectadas, toda vez que el consumo en estas circunstancias se reduce provocando una crisis en la economía de muchas familias.
“El Estado de Yucatán, ha implementado una serie de medidas para hacer frente a esta contingencia; sin embargo, en los últimos días se han reportado cortes en el servicio de la luz eléctrica que han afectado a ciudadanas y ciudadanos de diversas poblaciones del estado, en particular de la ciudad de Mérida, lo que implica una preocupación seria para las y los ciudadanos yucatecos, pues en plena contingencia el servicio eléctrico es fundamental y vital”, exhortó.
Comentó que a través de la energía eléctrica se pueden mantener en perfecta conservación los alimentos, en muchas ocasiones las medicinas, ventilación en los hogares y negocios cuya temperatura en esta entidad puede alcanzar los 40 °C. La energía eléctrica sostiene todo tipo de telecomunicaciones, aparatos y equipo médico que permite a los hospitales, clínicas y hogares mantener la salud y la vida de sus ciudadanas y ciudadanos, indicó.
Alonzo Morales resaltó que la electricidad permite que funcionen las fábricas y los negocios, aún los más pequeños. Alimenta a los equipos de bombeo y distribución del agua potable en los hogares; a los sistemas de riego en el campo yucateco, entre otras relevantes actividades económicas.
Por ello, el servicio eléctrico no puede ser considerado como una mercancía, sino que en realidad es un derecho humano y social que debe ser garantizado por el Estado y al cual deben tener acceso todas las personas que habitan en el país, exhortó.
Resaltó que el servicio eléctrico en plena contingencia retoma un papel fundamental para la estrategia de salud y económica del país; pero sobre todo alcanza una dimensión mayor a la de un servicio público. Prescindir de ella en estos momentos no es opción y mucho menos ante el escenario que se visualiza en los próximos días.
“Los cortes del servicio eléctrico por deficiencias en el servicio o por incumplimiento de pago no son admisibles en la emergencia actual, ni para los hogares, ni para las actividades económicas”, expresó.
A la preocupación por la salud y bienestar de las familias se suma la angustia por el pago del recibo de la luz. A los problemas de la caída de las actividades económicas se incorpora el costo de la energía eléctrica, en especial para los pequeños negocios y las parcelas agrícolas, finalizó.