Solo los que conocen la historia de su pueblo y fueron testigos del trabajo y esfuerzo para edificar el presente, pueden entender el verdadero valor de las mujeres y hombres que tuvieron la audacia y visión para luchar y heredarnos un futuro promisorio como sociedad.
La historia y evolución del Municipio de Progreso, tiene un antes y un después de Víctor Manuel Cervera Pacheco, un Gobernador que durante su sexenio demostró con acciones de infraestructura y políticas públicas su amor y compromiso por nuestra tierra y su gente.
Hoy Progreso tiene una posición importante en el desarrollo económico de Yucatán y México, y esto es Gracias a la visión que tuvo Cervera pacheco.
La Construcción y Ampliación del Puerto de Altura y Cabotaje, el Turismo de Cruceros, la Carretera Iluminada de Ocho Carriles Mérida-Progreso, el Instituto Tecnológico Superior Progreso, la Pista Internacional de Remo y Canotaje, el Ordenamiento Territorial y la Construcción del Fraccionamiento Ciénega 2000, se suman a la Construcción de Calles, Ampliación de la Red Eléctrica y de Agua Potable, Construcción y Remodelación de Parques y Espacios Deportivos, fueron acciones de desarrollo urbano que nos consolidaron como una ciudad lista para iniciar su proyección en muchos ámbitos y asegurar el impulso de inversiones para diversificar y crecer nuestras actividades económicas, productivas y comerciales.
Pese a quien le pese, Víctor Manuel Cervera Pacheco es y será siempre un referente histórico para nuestro Municipio, como Progreseña, expreso mi rechazo a la decisión del Cabildo del Ayuntamiento de Progreso 2018-2021, por tomar la decisión de cambiar el nombre del Boulevard Progreso-Chicxulub Puerto, que llevaba su nombre.
Quienes tenemos alguna responsabilidad en la función pública, debemos entender que las decisiones se toman con respeto a la sensibilidad ciudadana para fortalecer la armonía y cohesión social.
La sociedad Progreseña la integran mujeres y hombres de trabajo y lucha incansable, somos una sociedad plural y diversa, que analiza y opina, que habla claro y de frente, como servidores públicos, nos debemos a esa ciudadanía, bajo la obligación moral de trabajar sin distinciones de ningún tipo.
Cambiar el nombre del Boulevard Víctor Manuel Cervera Pacheco, no cambia la historia, no merma el reconocimiento, ni dejará en el olvido el recuerdo y la gratitud de un pueblo hacia un hombre que hizo del futuro de una comunidad su propio destino.
La función pública nos da la oportunidad de escribir nuestra propia historia y esta se escribe con esfuerzo, probidad, respeto y nobleza.