Autoridades suizas se vieron en la necesidad de asignar a un fiscal especial, para que sea él quien determine si las reuniones en secreto que mantenía el secretario de justicia, Michael Lauber, y el presidente de la FIFA, Gianni Infantino se contemplan como un delito.
Un panel del gobierno de Suiza la cual supervisa a la fiscalía federal dio a conocer el viernes mediante un comunicado que esta semana asignó a Stefan Keller la evaluación de cuatro denuncias, las cuales las presentaron personas no identificadas.
En el comunicado no se especifica la fecha en el Keller presentará sus conclusiones, ya sea que las querellas sean desestimadas por falta de fundamentos o que recomiende que se lleve a cabo una investigación con mayor profundidad.
En el 2016, Lauber e Infantino se reunieron en par de ocasiones, esto ocurrió poco después de que el presidente de la FIFA fuera electo, otra reunión se dio en junio del 2017, justo cuando el secretario de Justicia desarrollaba una extensa investigación por corrupción, la cual estaba ligada al organismo rector del futbol mundial y a funcionarios de distintas partes del mundo.
Actualmente tres exfuncionarios de la FIFA se enfrentan a procesos judiciales, entre los cuales se encuentra el antecesor de Infantino, Joseph Blatter, además del ejecutivo qatarí de futbol y televisión, Nasser al-Khelaifi. Todos ellos niegan haber sido participes de un delito.
“Todo es absurdo” dijo Infantino en un videoconferencia el pasado 25 de junio, esto debido a las preguntas por las denuncias formales presentadas. “Reunirse con el fiscal en jefe o el secretario de Justicia de Suiza es perfectamente legítimo y perfectamente legal”.
A su vez, la FIFA aplaudió la asignación de Keller al señalar que “también le interesa a la FIFA que las denuncias anónimas sean investigadas lo más pronto posible”.
Las reuniones que sostuvieron durante el 2016 se dieron a conocer en noviembre de 2018 por la serie Football Leaks, la cual fue publicada por una revista alemana, la cual obtuvo documentos y mensajes de correo electrónico confidenciales en la industria del futbol.
Laber e Infantino sostienen que las reuniones que tuvieron en el 2016 fueron un proceso de rutina para garantizar la cooperación en el proceso de investigación sobre corrupción. Ninguno de ellos ha reconocido una tercera reunión, la cual fue reportada por medios suizos algunos meses después.
FUENTE: ESPN (Portal electrónico)/Foto: Twitter @FIFAcom
