El cubrebocas y careta no les permite respirar bien, lastiman y dan dolores de cabeza. El traje da tanto calor que terminan con la ropa mojada, después de usarlo durante 8 horas seguidas y sin poder ir al baño. Aún así trabajan todos los días sin cesar, sin rendirse, siempre dispuestos a ayudar y arriesgar su vida para cuidar de todos nosotros, aún cuando no pueden estar cerca de su propia familia. Estos son los verdaderos héroes, nuestro personal médico. Gracias por su lucha y sacrificio en esta pandemia. No están solos, todos los yucatecos les agradecemos su esfuerzo. #UnidosComoUnoSolo