Lo llamaban el Lunes Feliz.
Inglaterra iniciaba la salida de su última cuarentena contra el coronavirus, impuesta a principios de año. Familias y amigos podían volver a reunirse al aire libre, y muchos deportes se permitían de nuevo.
Como si estuviera en sintonía, el tiempo empezó a mejorar y se esperaban temperaturas más habituales para el sur de España en esta época del año.
A partir de este lunes, grupos de hasta seis personas, o dos hogares, podían socializar de nuevo en parques y jardines, mientras que las instalaciones deportivas podían reabrir tras la dura ronda de confinamiento, que ha hecho bajar de forma drástica los nuevos contagios durante los últimos tres meses.
Tras meses recluidos en casa, mucha gente disfrutaba de la perspectiva de poder disfrutar de su deporte preferido al aire libre, desde el tenis a la natación en piscinas descubiertas. También podían reanudarse los deportes de equipo organizados como clubes infantiles de fútbol.
Uno de los primeros -si no el primero- en reabrir este lunes fue el Club de Golf Morley Hayes, cerca de Derby, en el centro del país, donde los jugadores empezaron un torneo benéfico de siete hoyos a las 00:01 de la madrugada.
El resto de Reino Unido -Escocia, Gales e Irlanda del Norte- avanzaba en la misma dirección. En Gales, miles de personas acudieron el sábado a playas y zonas de montaña después de que las autoridades levantaran las restricciones de viajes impuestas en diciembre.
Inglaterra mantenía buena parte de sus restricciones, y el Gobierno británico reiteró que seguiría una política prudente en la reapertura, entre otras cosas por el auge de los contagios en la Europa continental.
La mayoría de los negocios no esenciales seguían cerrados, al igual que pubs, restaurantes, gimnasios, cines, teatros, museos y estadios deportivos. El Gobierno seguía instando a la gente a trabajar desde casa si podía. Los viajes internacionales continuaban prohibidos salvo por algunas excepciones.
Gran Bretaña ha registrado más de 126 mil muertes por COVID-19, la cifra más alta de Europa. Las muertes han caído de forma drástica en las últimas semanas, al igual que el número de contagios, desde el inicio de la cuarentena y el rápido avance de la campaña de vacunación. Gran Bretaña registró el domingo 3.872 casos nuevos, el dato diario más bajo en seis meses.
El primer ministro británico, Boris Johnson, instó a la población a mantener la cautela y no socializar en espacios cerrados. Una campaña de información pública advertía del riesgo de las reuniones bajo techo.
“Pese al alivio de hoy, todo el mundo debe continuar ateniéndose a las normas, recordar ‘manos, rostros, espacio’ y acudir a vacunarse cuando le citen”, indicó Johnson.
El mandatario dijo confiar en que el levantamiento de las normas “dé inicio a un gran verano británico del deporte”. Varios deportistas famosos participaron en una campaña del gobierno instando a la gente a reanudar la actividad física.
Fuente: El Financiero