- La infraestructura posibilita el bienestar de la población, afirmó el secretario de Comunicaciones y Transportes
- Titular de SCT participó en el Seminario Franco-Mexicano de Infraestructura Urbana, organizado por el CICM y la Embajada de Francia
Las grandes obras que ha realizado la SCT reflejan el compromiso de los mexicanos para labrarse los caminos que lleven a un mejor futuro, a partir del trabajo y la organización colectiva, con el convencimiento de que la infraestructura posibilita el bienestar de la población, aseguró el secretario de Comunicaciones y Transportes, Ing. Civil Jorge Arganis Díaz-Leal.
Al participar en la inauguración del Seminario Franco-Mexicano de Infraestructura Urbana/ La Experiencia del Gran Paris, organizado por el Colegio de Ingenieros Civiles de México (CICM), que preside el Ing. Luis Rojas Nieto, y la Embajada de Francia en México, el titular de la SCT dijo que este año la Secretaría cumple su 130 aniversario.
En el evento, en el que participó la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Dra. Claudia Sheinbaum Pardo, el secretario de Comunicaciones y Transportes expuso que la dependencia ha estado presente en todas las etapas sociohistóricas que México ha vivido: apuntalando, resguardando y desarrollando una infraestructura a lo largo y ancho de todo el país.
“Detrás de nuestras grandes obras se encuentra el esfuerzo cotidiano de mujeres y hombres que han hecho posible las comunicaciones y los transportes de México. Ellas y ellos han sido artífices de toda una red ferroviaria y de majestuosos puentes; puertos, aeropuertos y de largas carreteras que serpentean las zonas más agrestes y enlazan todos los puntos del territorio nacional”, añadió.
Arganis Díaz-Leal afirmó que ello habla de la participación y entrega de la gente. “Grupos que incluso contribuyen con el trabajo comunitario, conocido como tequio, para construir sus propios caminos rurales, de manera artesanal, que hoy con sus piedras rodadas parecen verdaderas obras de arte”, expuso.
El ejemplo francés, dijo, es una lección que debemos aprender, no sólo nosotros, sino todos los países del mundo, planteó.
El proyecto del Gran París, que se materializó en una planeación urbana integral, se ha desarrollado de manera virtuosa. Ha sabido respetar la belleza y el valor histórico de sus edificios antiguos, integrando una infraestructura moderna, que responde a las necesidades actuales de manera armoniosa con la gente y su entorno.
La idea sustancial del Gran París tiene un fundamento humanista, que se sustenta en una verdadera consideración a los peatones, a los ciclistas y a los discapacitados, con un absoluto respeto por el medio ambiente.
Las lecciones aprendidas de esta iniciativa son muchas y dan cuenta de las enormes tareas que es necesario emprender en otras latitudes, ciertamente bajo circunstancias diferentes y con distintos niveles de complejidad, resaltó el secretario de Comunicaciones y Transportes.