El Gobierno ruso ha expresado su preocupación por los planes de la Administración de Estados Unidos de enviar 1,000 militares adicionales a Oriente Próximo, en plena escalada de tensiones entre Washington y Teherán por los últimos incidentes cerca del estrecho de Ormuz.
«Llamamos a todas las partes a la contención y, por supuesto, preferimos que no se tomen medidas que puedan provocar más tensión en la región que es de por sí inestable», ha afirmado este martes el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, según la agencia de noticias oficial Sputnik.
En la misma línea se ha manifestado el viceministro de Exteriores, Sergei Riabkov, quien a falta de aclarar las «filtraciones» que se han ido conociendo en las últimas horas ya ha dado por hecho que la presencia militar de Estados Unidos «seguirá aumentando». «Esto nos preocupa», ha subrayado.
El Ejército estadounidense publicó el lunes nuevas imágenes para demostrar la implicación de la Guardia Revolucionaria iraní en los ataques de la semana pasada contra dos petroleros en el golfo de Omán. Irán, por su parte, ha negado cualquier responsabilidad en este incidente.
Fuente: El Periódico de México
