Mérida, 10 junio de 2025.- Sin aviso previo, la Universidad Tecnológica Metropolitana (UTM) fue cerrada este día por un grupo de 26 personas, mismas que mantienen secuestrada a la institución en perjuicio de tres mil 500 alumnos y 340 profesores y trabajadores administrativos, informó la rectora de la institución, Marysol Canto Ortiz.
En entrevista, sostuvo que dichas personas mantienen cerrazón, pese a la oferta oficial de diálogo y las necesidades de los estudiantes de continuar sus estudios, la preparación de evaluaciones finales y el fin del curso cuatrimestral.
Ubicada al sur de la Ciudad de Mérida, las puertas de acceso al plantel permanecen desde hoy cerradas con cadenas y banderas rojinegras, lo que afecta, dijo la funcionaria, tanto de la formación académica de los estudiantes como el pago de nómina a los profesores y trabajadores administrativos.
“Si nosotros no tenemos acceso a los servidores no podemos cumplir con el pago de la nómina y eso es algo que a ellos no les importa y lo único que quieren es exponer sus exigencias sin precisar al respecto” puntualizó.
Dijo que las personas que bloquean los accesos se han autonombrado miembros y representantes del Sindicato Nacional de Educación Superior (SNES) sin tener validez su registro sindical ni la toma de nota, o sea, carece de representación legal para realizar estas acciones.
Estas acciones se suman a las realizadas en otras diez universidades del estado como tendencia a los paros impulsados desde el centro del país por la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), la cual ya terminó desde el domingo pasado con las movilizaciones iniciadas el 15 de mayo.
La rectora recalcó la importancia de que los alumnos retornen a las aulas, a los laboratorios de ciberseguridad y de tecnologías de la información, así como de otras áreas del conocimiento y dijo que suman 800 los alumnos que este año deben terminar la licenciatura y recibir sus constancias el próximo lunes y martes.
A su vez, mediante sus redes sociales, el autonombrado SNES expresó su compromiso de luchar “por una educación de calidad para los estudiantes de la UTM” y aseguró que sus acciones “se basan en el diálogo, el respeto y la responsabilidad con la educación pública”.
Sin precisar peticiones, el comité de la lucha expuso que demanda “instalaciones e infraestructura de calidad para impartir cátedras acordes a las necesidades del sector laboral” y la abrogación inmediata de la Ley del ISSTEY por considerarla una grave afectación a sus derechos adquiridos.
Sin precisar si tienen el respaldo estudiantil, demandan mejorar la infraestructura educativa (aulas, laboratorios, baños, talleres), acceder a tecnología, mobiliario y materiales didácticos actualizados y fortalecer servicios de biblioteca, internet, comedores y transporte.
Por Jesús Mejía
