- Se decidió mantener esta medida de prevención para seguir cuidando la salud de la población, pues ayuda a evitar la movilidad, el contacto social innecesario y las reuniones sociales.
Mérida, Yucatán, 11 de agosto de 2020.- La Ley Seca se mantendrá en todo el territorio estatal hasta el próximo 17 de septiembre como medida para evitar la movilidad, el contacto social innecesario y las reuniones sociales que no ayudan a la prevención y contribuyen a relajar el cuidado de las medidas sanitarias ante la situación de pandemia por el Coronavirus, informó el Gobierno del Estado.
El Gobierno estatal indicó que la prohibición de venta de bebidas alcohólicas contempla a todos los establecimientos y lugares a los que se refiere el artículo 253-A de la Ley de Salud del Estado. La persona física que infrinja lo dispuesto podrá hacerse acreedora hasta 6 años de prisión y hasta 200 días-multa, de acuerdo con el Código Penal del Estado.
Hay que recordar que esta medida de prevención se dispuso ante las circunstancias de alto riesgo generado por la actual emergencia sanitaria.
Asimismo, se expone que ante el escenario que se ha presentado a causa de la evolución de esta enfermedad en el país y el estado se decidió adoptar medidas extraordinarias, tanto por el Gobierno del Estado como por las demás autoridades de salud pública, que contribuyan a disminuir la movilidad y el contacto social innecesario.
Esta medida, junto con otras que se han implementado, han estado funcionando y dando resultados, sin embargo, esta mejoría ha sido leve, por lo que es necesario seguirlas aplicando y no bajar la guardia en las disposiciones de salud y para la prevención.
El Gobierno del Estado reitera que todas las sociedades tenemos el enorme reto de continuar luchando contra la propagación del Coronavirus, al mismo tiempo de encontrar la manera de continuar protegiendo los empleos existentes y también el de generar nuevos empleos, razón por la cual en Yucatán se ha venido trabajando muy fuerte para lograr que la reapertura económica funcione para que las familias tengan empleo e ingresos ante los graves efectos económicos de la pandemia sin que se llegue a ver comprometida nuestra capacidad hospitalaria.