La epilepsia es una afección del sistema nervioso, caracterizada por crisis convulsivas que se presentan en forma crónica y recurrente por diversas causas. Este padecimiento no tiene cura; sin embargo, en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Yucatán, existen varios tratamientos y medicamentos (intravenosos y orales) que ayudan a los pacientes a controlar las crisis epilépticas y conservar su calidad de vida, ya que la epilepsia no es una incapacidad o limitante.
Entre el dos y tres por ciento de la población padece esta afección, y aunque no presenta síntomas, es recomendable solicitar un chequeo médico cuando se ha registrado: pérdida del conocimiento, movimientos involuntarios, desmayos o antecedentes familiares, para confirmar el diagnóstico pertinente, informó el neurólogo del Hospital General Regional (HGR) No. 1, Antonio Gien López.
Este padecimiento puede manifestarse a cualquier edad, ya que se tiene registro de bebés que presentan epilepsia debido a algún tipo de anomalía o malformación en el cerebro; también se ha considerado como una reacción secundaria debido a una embolia, derrame, daño cerebral o por antecedentes familiares.
Quienes ya fueron diagnosticados con epilepsia no deben abandonar el tratamiento ni cambiar las dosis sin autorización de un especialista; ya que esta es una de las principales causas de que nuevamente se presenten las crisis convulsivas.
La crisis convulsiva constituye una verdadera urgencia médica, dado que puede conllevar complicaciones importantes y puede ser un síntoma de otras enfermedades. En caso de presenciar una crisis convulsiva, es importante vigilar que nada pueda caerle encima al afectado, ya que por sus movimiento involuntarios podría tirar o chocar con objetos que estén a su alrededor, también puede ser colocado en una posición de lado, ya que muchas veces hay vómito y así se evita que pueda ahogarse por bronco aspiración.
También es importante no introducir nada en la boca, pues hay objetos que podrían producir asfixia u otras lesiones.
