- El contar con esta herramienta ayudará a afrontar de manera oportuna cualquier emergencia médica menor
- Es necesario revisar cada seis meses el contenido del botiquín, para desechar lo que ya no sirva y reponer lo que hiciera falta
La Oficina de Representación Yucatán del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) subraya la importancia de mantener siempre un botiquín de primeros auxilios en el domicilio, que contenga las herramientas y elementos para poder auxiliar en caso de un accidente menor, por ejemplo: quemaduras leves, raspones o cortadas con objetos punzocortantes, entre otros.
Debido a que en la casa, escuela, trabajo o automóvil, es donde se registra el mayor número de accidentes, un botiquín de primeros auxilios es una necesidad básica; ya que esta herramienta ayuda a afrontar de manera oportuna cualquier emergencia médica menor, sin necesidad de trasladarse a una unidad de salud, explicó el doctor Alonso Sansores Río, titular de la Jefatura de Prestaciones Médicas.
Añadió que también es importante que se coloque en un lugar seguro y de fácil acceso para las personas con la responsabilidad de apoyar en este tipo de casos; de igual forma, se debe tener conocimiento de todos los elementos que lo integran.
Es importante que se localice en un lugar seco, lejos de la humedad y del sol; su fácil traslado también es una prioridad, ya que muchas veces requiere ser llevado hasta el área en donde se encuentra la persona afectada.
El especialista señaló que un botiquín básico debe contar con: alcohol o yodo para desinfectar o prevenir infecciones; suero fisiológico para lavar heridas y quemaduras; crema para picaduras, jeringas, vendas, gasa, pañuelos de limpieza, guantes protectores desechables, termómetro, gotero, algodón, tijeras y vendas adhesivas.
También se puede agregar un manual de instrucciones para orientar sobre lo que contiene el botiquín y el uso de cada sustancia; de igual forma se debe mantener cada material o medicamento en su empaque original para tener las identificaciones de manera segura, rápida y oportuna.
Debido a que se maneja material de curación, es necesario revisar el contenido del botiquín cada seis meses, pues con ello se pueden constatar las fechas de caducidad, y así es posible desechar lo que ya no sirve y reponer lo que hiciera falta.
Finalmente, el especialista reiteró que el uso del botiquín es para incidentes menores o leves, pues en el caso de sufrir cualquier accidente de gravedad, la mejor opción es trasladar a la víctima a urgencias o de no ser posible, comunicarse a los números de emergencia para recibir la atención médica correspondiente en el sitio.