Los Zorros de Pacabtún, viniendo de atrás, remontaron una desventaja que parecía imposible de alcanzar y a sangre y fuego consiguieron la paridad 8×8 en la séptima entrada. El duelo de pitcheo inició a partir del octavo rollo y sin un vencedor después de jugarse las nueve entradas reglamentarias, Julio León se vistió de héroe al disparar el imparable que remolcó la carrera que le dio un vibrante triunfo de 9×8 a los cánidos en 10 episodios, sobre los Diablos de la Bojórquez, que quedaron tendidos en el terreno de juego.
Emociones a raudales vivieron los aficionados que se dieron cita en el campo “Manuel Loría Rivero”, de Pacabtún, en el partido de la cuarta fecha de la Liga Meridana de Invierno de Béisbol, inmueble que se estremeció con el jit del refuerzo de los Zorros que envió, desde la intermedia, a Willy Villanueva, quien negoció la base por bolas, avanzó por wildpitch, y timbró con el incogible de León.
El equipo dirigido por Salvador Arellano no aprovechó el tropiezo de los Azulejos de la Dolores Otero y con la derrota, el liderato lo comparte junto con los Senadores de la Morelos, los verdugos del conjunto emplumado.
La fiesta en el averno inició en la tercera entrada, después de que el abridor de los Zorros, Abraham Castañón, les colgó las primeras dos argollas. El infernal ataque causó estragos a su serpentina que fue despedazada a punta de cañonazos.
Con dos fuera, y con Leo Ramírez en la inicial, por pelotazo, Sergio “Yeyo” Pacheco disparó imparable al izquierdo y siguió Isidro Piña con panorámico cuadrangular de 3 carreras. Carlos Rodríguez repitió el trancazo, ahora por el central y con el jonrón “espalda con espalda”, los Diablos tomaron la delantera 4×0.
En el cuarto rollo, siguieron las diabluras del equipo visitante y nuevamente, con su artillería de largo alcance, incrementaron la ventaja. Rigoberto Gómez abrió la tanda de bateadores con sencillo al derecho y no tardó mucho en los senderos, porque Aaron Olivera disparó bambinazo de 2 carreras que pudo la pizarra 6×0.
Los Zorros dieron señales de vida en el cierre y con 4 carreras, redujeron la distancia, sobre las serpentinas del abridor, Juan Salvador Delgadillo. Julio León disparó imparable, se estafó la intermedia y anotó con jit productor de Fernando Martínez y con la casa llena, gracias de par de bases seguidas, el sencillo de Javier Castro, remolcó la segunda carrera. Raúl García continuó la pachanga y con incogible al central impulsó dos más que acercó 6×4 a los cánidos.
El ataque lo frustró una desatención del debutante Robert Rabassa, quien abrió demasiado en la intermedia, retando el brazo del receptor, y pagó caro su osadía al ser enfriado por certero disparo de Isidro Piña a Raymundo Aguayo.
Abraham Salomón, mánager-jugador de los Zorros dejó en el cerrito a Castañón, a quien retiró después del pasaporte que le concedió a Isidro Piña, abriendo la tanda del quinto rollo. Lo sustituyó Julio César Zapata y apagó el fuego del averno en las siguientes dos entradas, pero en el “Lucky Seven”, fue raspado con dos carreras, por jonrón de Emilet Guevara, con Carlos Rodríguez en los senderos, y la ventaja de los kisines se incrementó 8×4.
La respuesta de los Zorros llegó de inmediato, en el cierre, abriendo la tanda de bateadores Robert Rabassa, quien disparó su primer jit en la Liga Meridana. Tras uno fuera, Mario Vega conectó un trancazo entre el izquierdo y central que superó la barda y tras acreditarle el jonrón al bateador, Salvador Arellano reclamó que la pelota atravesó la puerta que se ubica en ese sector, y de forma sorpresiva, cambiaron la decisión a doble, por lo que el bambinazo y las carreras fueron borradas.
El “Turco” Salomón no lo podía creer y las repeticiones en la transmisión del partido por el Sistema Digital de Televisión demostraron que el trancazo de Vega rebasó la barda.
El extrabase fue el último disparo de Delgadillo, quien fue relevado por Ricardo Negrón que más tardó en subir al cerrito que en salir del juego, ya que enfrentó nada más a 3 bateadores. Julio León le dio la bienvenida con imparable productor, Fernando Martínez siguió con otro batazo similar que envió una carrera a la registradora, la tercera anotación entró de “caballito” y Raúl García, en jugada de selección, coronó el ataque de 4 carreras que empató el juego 8×8, sobre las serpentinas de José García, el derrotado.
Después de Julio César Zapata, quien salió en la octava entrada, ingresó Wilfredo Ramírez, el ganador en 3 entradas de labor que completó con 2 jits, con 7 ponches. En total, el pitcheo de los Zorros despachó 17 chocolates y se quedaron a 2 de igualar el récord del circuito.