- Será la voz para dialogar y consensuar propuestas con los diferentes niveles de gobierno.
- Se demandan soluciones a las demandas de los empresarios.
Mérida, Yucatán, 10 de marzo de 2020.- Con el compromiso de encabezar un organismo dinámico y propositivo en la implementación de estrategias que ayuden al desarrollo y crecimiento de los sectores productivos, Michel Salum Francis tomó protesta como presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) para los próximos seis meses.
Al asumir la dirigencia del máximo organismo empresarial en el estado, el también presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco Servytur) de Mérida aseguró que el compromiso que asume es dirigir un CCE vigilante y crítico de la actuación de las autoridades de los tres niveles de gobierno.
El Consejo Coordinador Empresarial, dijo, seré la voz para dialogar y consensar propuestas con los diferentes niveles de gobierno en la búsqueda de soluciones a las demandas de los empresarios de los diferentes sectores productivos aquí representados a través de las diferentes cámaras y asociaciones que lo integran, anotó.
“Por ser un organismo plural, respetaré las ideas y propuestas de cada uno de los integrantes, porque las decisiones y acciones nunca serán de carácter individual, siempre serán analizadas entre todos para mejorarlas, antes de aprobarla, porque nuestro interés es el bien colectivo”, asentó.
En presencia del presidente saliente del CCE, Raúl Aguilar Baqueiro, así como de los líderes de otras cámaras y organismos empresariales locales, Salum Francis indicó que se dará seguimiento a las acciones gubernamentales, señalando aquellas incorrectas y reconociendo las que son adecuadas para el crecimiento del estado.
Pidió a los gobiernos de los tres niveles las condiciones necesarias de seguridad, infraestructura, educación y salud para tener un mejor entorno para hacer negocios en Yucatán.
Sobre su plan de trabajo, puntualizó que una de las prioridades será mantener una relación cordial con las autoridades, con quienes conformarán una agenda con diversos temas como infraestructura, tarifas eléctricas, turismo, y se dará continuidad aquellas que han tenido éxito y que ayudan a tener una estabilidad social y económica en la entidad.
En el tema de las tarifas eléctricas, afirmó que el sector empresarial mantendrá su postura firme de insistir en su homologación respecto a otras regiones del país, a fin de pagar un menor costo, que ayude a incentivar las inversiones.
Además, se pedirá contar con el abasto suficiente de gas natural, elemento indispensable para el desarrollo de la industria local, que requiere ser más competitiva y dejar de poner en riesgo su productividad, apuntó.
Michel Salum dejó en claro que Yucatán requiere de atención en muchos temas que impactan directamente a la producción, competitividad y desarrollo, como son incentivos fiscales y cargas tributarias que muchas ocasiones son una obligación fuerte para las empresas y que inhiben las inversiones y el crecimiento económico.
Como CCE, expuso, plantearemos la creación de una agenda común con el gobierno del estado para tratar, analizar y buscar opciones que ayuden al desarrollo económico local, no solo basado en la industria sino también en el turismo, actividad que tiene una gran presencia en Yucatán y que genera una importante derrama económica.
El nuevo presidente del CCE Yucatán aseveró que en el sector turismo, con el Tianguis Turístico de México 2020 que se realizará del 22 al 25 de marzo próximo en esta ciudad, se darán seguimiento a las reuniones y convenios que realicen los empresarios locales, para tener beneficios a mediano y largo plazo.
En materia de seguridad, tema de gran importancia para todos los yucatecos, sostendrán una buena relación de trabajo con el Gobierno del Estado para coordinar esfuerzos y seguir preservando la paz y tranquilidad que se goza actualmente.
El presidente del CCE precisó que un punto que sigue pendiente, porque se atiende de manera parcial, es la informalidad, en el cual se insistirá en disminuir la presencia de vendedores informales en diversos puntos de la ciudad, principalmente el centro histórico, pues representan una competencia desleal para al comercio organizado y una vía de comercializar mercancía de dudosa procedencia y sin ningún control de calidad.