- “La obra pública es bienvenida, siempre y cuando ayude a los ciudadanos”: Silvia López Escoffié
- Destaca diputada Milagros Romero Bastarrachea que la revisión de las cuentas es primordial para combatir la corrupción
Mérida, Yucatán, 03 de junio de 2020.- La fracción parlamentaria de Movimiento Ciudadano aseveró que tras el banderazo inaugural de la construcción del Tren Maya vigilará los procesos y los costos del mega proyecto, para asegurar que haya transparencia en el uso de los recursos.
La legisladora Silvia América López Escoffié sostuvo que está a favor del desarrollo económico y de la creación de nuevos empleos, sin embargo, puntualizó que durante los meses que dure la obra, supervisará a las empresas que participan y que las adjudicaciones sean de acuerdo con la normatividad vigente.
“Estoy convencida de que la península yucateca requiere de obra pública para detonar la economía en la región, no obstante, tenemos que velar que el dinero se invierta con eficiencia”, explicó.
En el mismo sentido, la diputada Milagros Romero Bastarrachea, advirtió que vigilará muy de cerca cada acción que realicen las autoridades federales en la entidad, para garantizar que se respeten los costos y los procesos durante la construcción.
Puntualizó que en un proyecto de tal magnitud se requiere de una visión integral para que los pueblos indígenas no sean desplazados, se respete los ecosistemas selváticos y se tenga un enfoque sustentable.
Además reafirmó que de poco sirve la detonación económica en un lugar sino viene acompañado de desarrollo humano, por ello, aseveró que estará pendiente del respeto a los derechos de las comunidades mayas por donde pasen las vías del tren.
Agregó que le dará seguimiento a las personas que fueron designadas como responsables de supervisar los trabajos y avances de la construcción.
DATO HISTÓRICO
López Escoffié explicó que los caminos de hierro fueron trascendentales para el desarrollo económico yucateco, y estuvo a cargo de la empresa Ferrocarriles Unidos del Sureste (FUS) durante el siglo pasado.
Dijo que el sistema ferroviario de la península conectó de manera interna desde finales del siglo XIX hasta mediados del siglo XX, durante la época henequenera, y unió a los territorios de Yucatán, Campeche, Quintana Roo, Chiapas, Tabasco y Veracruz.
Bajo ese esquema, consideró que el Tren Maya podría detonar el desarrollo en muchos poblados que han quedado rezagados.
