Perdón, pero es que no me queda nada claro y cuantas más cosas se suman a la famosa investigación, más abismos se abren… Porque, no fue nada inteligente haber metido al Grupo Carso para tapar una calle, podrían haber escogido muchos vehículos de transporte distintos y con logotipos falsos.
Detener en Lomas de Chapultepec, en plena zona de Paseo de la Reforma, al vehículo del secretario de Seguridad Ciudadana de la CDMX para meterle más de 400 disparos, granadas, y 5 Barret pone en evidencia un poderío armamental que todos “dudaban” que hubiera en la CDMX.
Perdón, pero algo no checa. Alguien no dio bien las órdenes, o alguien “no dio las órdenes” y se fueron por la libre.
No pensaron que con algunas armas de muy penetrante calibre iban a interesar el blindaje de los vehículos, lo cual sucedió, pero no en la profundidad que supuestamente previeron. Pese a que la pandilla tenía más de 20 atacantes, no todos poseían ni las armas ni la “preparación” para una emboscada como la que “pretendían”.
Ahora, los videos no dejan claro cómo milagrosamente el blindaje salvó la vida del joven maravilla, ni tampoco cómo es que en poquísimo tiempo lograron capturar a los primeros presuntos delincuentes y al tal José Armando Briseño apodado El Vaca, que dispuso de horas y horas para irse lejos y se quedó en la Ciudad de México a esperar que lo capturaran.
¿Qué instrucciones tenían los autores del delito? Y, ¿sabían quién las había girado?
Se rumora que el Cártel Jalisco Nueva Generación hizo alianzas con gente de La Unión Tepito, del Cártel de Tláhuac y del Grupo ACME, de la Gustavo A. Madero. Supuestamente, investigaciones de la Fiscalía General de Justicia de CDMX indican que Julio César Montero Pinzón, apodado El Tarjetas, operador de confianza del líder del CJNG, ordenó el atentado en Puerto Vallarta, Jalisco, y habría enviado a José Armando Briseño, El Vaca, para que planeara y ejecutara el ataque contra el funcionario.
Algo muy feo está pasando allá afuera y eso no es lo peor, lo peor es estar en la ignorancia, frente a todas esas preguntas que nadie parece estar dispuesto a contestar, ¿de qué nos cuidamos, de quién?
Aletia Molina / JOSÉ CÁRDENAS.COM
@AletiaMolina
