- MEGAPROYECTOS NO SOLO CONTAMINAN EL AGUA Y AFECTAN EL CICLO NATURAL DEL AGUA, SINO QUE AL DEFORESTAR AFECTAN LA VIDA DE LOS ANIMALES SILVESTRES, SEÑALAN CAMPESINOS DE YUCATÁN
Peto, Yucatán, México a 17 de junio de 2022 (Boletín de la Asociación regional de silvicultores del sur de Yucatán).- Campesinos del sur de Yucatán, rompen el silencio y exigen que se detengan los megaproyectos debido a las múltiples formas en que afecta a sus vidas; el agua cada vez, más contaminada, y los animales silvestres cada vez no tienen alimentos y lugar para vivir, señalan.
“Los pájaros y los tejones, ahora se refugian en nuestras milpas y en dos por tres afectan nuestro sistema productivo, y sin esperanzas en llevar los alimentos al hogar”.
“Ahora es difícil cultivar y cosechar, incluso los tejones están incursionando en los solares urbanos o en las plantaciones de piñas, si bien hace algunos años, los tlacoaches, esperan que se maduren, hoy así de verdes los consumen”.
«Ahora los solares son afectados por plagas de ardillas, que acaban con los nances, frutos de mamuncillos, mangos entre otros frutos” resaltan en sus análisis de esos efectos directos de la aplicación de los megaproyectos.
“Si bien escuchábamos el caso de Homún, o los enormes charcos de heces fecales de las megagranjas en varias regiones, ahora esas granjas ya invadieron el sur de Yucatán, en donde no solo esperamos pestilencias, sino la grave contaminación del agua”.
“En nombre del empleo, megaproyectos amenazan la vida de todos, en donde no solo se pierden cosechas, sino la grave afectación por siempre del agua que consumimos”.
Lo anterior, fue parte del análisis realizado por la Asociación Regional de Silvicultores AC, U kanantaal Sihnaal, (Al cuidado del Medio Ambiente), el pasado domingo 12 de junio, al celebrar su asamblea ordinaria, en donde sus integrantes, se manifestaron en contra de los megaproyectos que reducen año con año la masa forestal de esta entidad, lo anterior, en vísperas del inicio de la temporada presente de las siembras, según el calendario agrícola tradicional.
Oficialmente se reconoce que cada año se pierden en esta entidad más de 20 mil hectáreas de selva baja o secundaria por la ampliación urbana y otras causas.
De acuerdo con su comunicado, los campesinos mayas de por lo menos 40 municipios de la zona centro, sur, y oriente de Yucatán, son los que cada vez ven reducida sus cosechas por los efectos del cambio climático, el cambio de uso de suelo, la deforestación y como consecuencia la falta de lluvias.
También reclaman el abandono y de la falta de políticas públicas reales que promuevan el desarrollo integral de las regiones de parte de las autoridades municipales estatales y federales, lo que al final favorecen el despojo de sus territorios, pues no existen subsidios reales para seguir reproduciendo su tecnología milenaria la Milpa, sistema que se caracteriza por proveer una alimentación sana y sustentable a corto plazo, maíz, frijol, calabazas, animales de traspatio y como subproducto de la selva, la miel de abejas.
Recordaron que, como pueblos originarios y campesinos, cada vez son violados sus derechos humanos, por su condición de vulnerabilidad han sido ignorados y marginados por los gobiernos anteriores y los de ahora, con lo del tren “maya”, ni siquiera fueron consultados a pesar que son directamente afectados en el territorio peninsular.
En la parte medular del comunicado expresa textualmente lo siguiente:
– Demandamos la suspensión total del tren maya porque ha provocado la llegada actores a acampar nuestras tierras, aumentar la violencia, y de paso acabar con nuestra única economía, la milpa y la apicultura, y de esa forma agravar y privarnos de nuestro sistema natural de riego, la temporada regular de lluvias, y sobre todo por erosionara la espiritualidad de nuestros usos y costumbres, la Cultura maya viva.
– Clausura de las mega granjas porcícolas que operan por todo el estado de Yucatán, que están contaminando los mantos acuíferos y que hoy en día ponen en riesgo la calidad del agua dulce, patrimonio de las nuevas generaciones.
– Que se respete nuestro derecho fundamental al territorio y a una producción sustentable como estaba antes del surgimiento de los agroquímicos.
– Mientras llegan los bioinsumos demandamos fertilizantes gratuitos como los que se entregan en otros estados del país.
– Que se implemente un programa emergente de entrega justa de maíz, por los siniestros de la temporada pasada, inundaciones y plagas.
– Que se otorguen incentivos a los que ya producen de manera orgánica y que se considere la capacidad del campesino en la regeneración de su propia tecnología y el uso de los saberes milenarios.
– Exhortamos a las demás comunidades y ejidos a organizarse para la defensa de la vida y el territorio.
Los miembros fundadores de esta organización no gubernamental, son primordialmente campesinos de origen maya, provenientes de comunidades pertenecientes a varios municipios ubicados en el sur de Yucatán, y que en otros tiempos fue considerado el granero del estado por proveer a otras poblaciones con el sagrado grano.
La Asociación Regional de Silvicultores U kanantaal Sihnaal, con sede, en Peto, Yucatán. Fue fundado desde el 2006, en una superficie territorial denominada Unidad de Manejo Forestal UMAFOR 3102 y tiene influencia en 12 municipios del Sur de Estado de Yucatán.
