- El estrés puede llegar a generar aumento de peso o pérdida de apetito, así como caída del cabello, fatiga o bajo deseo sexual
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Yucatán emite algunas recomendaciones básicas que se pueden seguir desde casa para ayudar a reducir y controlar el estrés, durante la actual emergencia sanitaria por COVID-19.
El titular de la Jefatura de Prestaciones Médicas, doctor Alonso Sansores Río, explicó que el estrés puede llegar a generar ansiedad, aumento de peso o pérdida de apetito, así como diarreas o estreñimiento; problemas en la presión arterial, caída del cabello, fatiga, bajo deseo sexual, dolores de cabeza e insomnio; por tal motivo el Instituto cuenta con diversos servicios para su atención.
Algunos de los factores que pueden generar estrés son: adaptación a la nueva normalidad, desacuerdos familiares, presión en el trabajo, así como la actual emergencia sanitaria por COVID-19; por ello el Instituto cuenta en sus unidades de medicina familiar y hospitales con psicólogos, psiquiatras y personal de Trabajo Social, para el seguimiento de cada caso.
También pone a disposición la orientación telefónica sobre salud mental, mediante la línea telefónica 8002222668 opción 4, de lunes a viernes de 08:00 a 20:00 horas. El servicio no atiende urgencias, pero brinda acompañamiento e información sobre técnicas de relajación y psicoeducación para intervenir en momentos de crisis.
Algunas técnicas que pueden ayudar a controlar el estrés son: la meditación, ya que permite aclarar la mente; las pláticas también ayudan a liberar las emociones; realizar actividad física relajan el cuerpo y escuchar música estimula el ánimo.
Otras recomendaciones para disminuir y controlar el estrés son: alimentarse de forma adecuada, dormir de preferencia entre siete y nueve horas por noche para reducir la sensación de ansiedad y evitar saturarse de actividades.
Se sugiere mantener contacto con familiares y amigos pero mediante llamadas telefónicas para poder romper cadenas de contagio de COVID-19.
También practicar yoga o pintura pueden ayudar a disminuir la tensión; sin embargo estas actividades no sustituyen el seguimiento de un especialista.
