- La diputada Rosana Couoh señaló que este concepto se basa en el respeto a los derechos y dignidad humana de niñas, niños y adolescentes.
Mérida, Yucatán, 11 de diciembre de 2024. – Con el propósito de tener sociedades más sanas y menos violentas, la diputada del PRI, Rosana Couoh Chan, presentó una iniciativa a favor de la Crianza Positiva para implementar políticas públicas que velen para que las niñas, niños y adolescentes crezcan en una vida libre de violencias.
En su intervención en el Pleno del Congreso del Estado, el cual lo hizo en español y lengua maya, explicó que la primera infancia es la etapa donde sí se siembra la semilla de la violencia, lamentablemente ésta se va a propagar en la etapa de la juventud y la adultez
“La Crianza Positiva se basa en el respeto a los derechos y dignidad humana de niñas, niños y adolescentes; es el método que deciden utilizar madres, padres y personas cuidadoras para cuidar y educar a través de conductas de disciplina no violentas”, abundó.
Dijo que la iniciativa propone incluir ese concepto en la Ley de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes de Yucatán, para garantizar la claridad en su interpretación y aplicación, ya que, aunque este término ya ha sido utilizado en la ley vigente, la falta de una definición clara genera incertidumbre sobre su alcance y significado.
“En el PRI tenemos claro que Yucatán necesita de una mayor difusión y sensibilización sobre la crianza positiva, destacando sus principios esenciales como la comunicación afectiva, el establecimiento de límites claros y el respeto mutuo, facilitando su comprensión y adopción como un modelo prioritario de cuidado infantil”, señaló Rosana Couoh.
También plantea que las madres, padres, tutores y/o responsables del cuidado de las infancias, tengan la obligación de garantizar una crianza positiva y respetuosa para el beneficio de su desarrollo integral.
Por último, sostuvo que esta iniciativa es el primer paso para permitir que las niñas, niños y adolescentes tengan un desarrollo emocional, cognoscitivo, físico, afectivo y lingüístico más sano.