Colaboración: L.C.C. FERNANDO CORONADO TAMAYO
COMPETIR: ¿PARA APRENDER O PARA GANAR?
Mucho del tiempo que pasamos en actividad, ya sea laboral, académica, económica y hasta familiarmente estamos expuestos a la competencia y no por gusto, es cultural nos enseñaron a competir, ¿quién es mejor o más importante? Y así crecemos desarrollando el:” deseo de ser importante” nombre dado a través de una teoría formulada por el más profundo filosofo de los Estados Unidos de Norteamérica el profesor: John Dewey otros estudiosos importantes de antaño incluso planteaban este impulso humano como una de las características más importantes que diferencian a la humanidad de los animales ( parte del párrafo tomada del autor Dale Carnegie1994).
Luego entonces desarrollándonos siempre y un entorno de competencia, dónde lo importante es sin duda ganar, dejamos de lado el valor que puedes adquirir de las experiencias ósea el aprendizaje, tan de lado lo dejamos que si no ganamos entonces perdemos y todo el esfuerzo realizado se convierte en nada.
Sin embargo, la idea que vengo a plantear es: ¿Qué tal si en lugar de tomar, no ganar como una derrota la tomamos como aprendizaje?
Muy pocas historias de éxito tienen un historial invicto, por el contrario, muchas personas que tocan la cima ya sea, deportiva, académica o económicamente, en realidad pasaron por una y mil derrotas, pero las reconoce como necesarias para gozar del punto en que llegaron a la silla del éxito.
Esta idea de: si no gano pierdo, en teoría parece convincente pero no puedes ir tan duro contigo mismo, en cualquier competencia se realiza un entrenamiento y horas de constancia perseverancia y esfuerzo, entonces es preciso comenzar a valorar el aprendizaje que nos deja cada tropiezo, cada decisión equivocada, porqué es parte el camino al que queremos llegar.
Luego de que la plataforma Netflix retomará la historia y filosofía del más grande jugador de baloncesto del universo Michael Jordan este personaje ha tomado mayor relevancia ya sin entrar a la duela. ¿Cómo alguien puede seguir siendo grande sin continuar haciendo lo que lo hizo grande?
Sin duda es su legado, la lealtad a su personaé dijo esta frase que engloba la idea de maravilla:
“He fallado más de 9,000 tiros en mi carrera, he perdido casi 300 juegos, 26 veces han confiado en mí para tomar el tiro que ganaba el juego y lo he fallado, he fracasado una y otra vez en mi vida y es por lo que hoy tengo éxito”.
La madurez de un atleta fuera de serie, motivador nato y ganador por excelencia es tal que acepta que los malos momentos en su vida llameémosles: “fracasos” como los llama él mismo, han sido parte del camino para que su nombre sea prácticamente inmortal aun estando vivo.
Su servidor es un convencido en que no podemos conocer la victoria sin la experiencia de la derrota y valorar el aprendizaje que deja cada resultado negativo.
Si nos centramos en ganar y no cumplimos el concepto equivocado de ese objetivo, creeremos que nuestro actuar no fue optimo o cometimos errores en el camino pero si iniciamos la competencia en el ámbito que sea con la mentalidad de aprender, ganar es sólo una opción no el único fin, lo hermoso de la vida es que si el tiempo y la salud lo permiten podrás tener una revancha cada 24 horas y si aprendes perfeccionas y no cometes los mismos errores, eso te llevará a una victoria asegurada ,tolerando y analizando tus derrotas. Te invito a comenzar a competir para aprender y a la postre ganar.
Agradezco tu lectura y te espero muy pronto aquí en #Tribuna plural.