La “XEFC, LA VOZ EN YUCATÁN DESDE MÉRIDA”, nació el 25 de julio de 1930 en la calle 74-A entre 45 y 47 por el rumbo del antiguo barrio de la Petronila. Ese verano se inició la operación de una de las emisoras más importantes de la radiofonía nacional y piedra angular del desarrollo de la industria radiofónica en el sureste del país. Destacando que en la inauguración de dicha emisora asistieron como madrinas: las señoritas Aida Lavín y las señoras Soledad Rendón de Goff y Mimí Ginés de Peón.
La programación de la música interpretada en vivo, se apoyaba con grabaciones fonográficas que la propia “Casa Molina Font” se encargaba de distribuir, de esta manera la radiodifusora tuvo un éxito inusitado cuando la transmisión llegó al puerto de Progreso.
Era un tiempo de entusiasmo y de creatividad que se generaba por parte de la radio. Una época en la cual la “XEFC, La Voz en Yucatán desde Mérida”, tuvo la iniciativa y la motivación para realizar una inauguración, donde el lenguaje, los ritmos, los efectos de sonido, las frases publicitarias, los tonos de voz, eran fundamentales para vender espacios promocionales, producir, ensamblar equipos, hacer la locución adecuada, crear los anuncios, elaborar la programación, pero sobre todo fue el momento indicado para darle a los radioescuchas, algo innovador.
Pocos meses después, el éxito y el crecimiento como radiodifusora fue inevitable y posteriormente la primera emisora comercial del sureste de México se traslada a las bodegas de la Casa Molina Font ubicada en la calle 59 entre 62 y 64 centro.
Después de dos años de emisiones que evolucionaron la improvisación en nuestros tiempos, Don Julio Molina comienza los trámites necesarios para obtener los permisos federales de operación de acuerdo con lo determinado por la legislación correspondiente. De esta manera, el 23 de julio de 1930, se conceden los registros legales para la emisora que, con las siglas XEFC, formaliza la existencia de la primera estación radiofónica de la península, “La Voz en Yucatán desde Mérida”.
En esos años transmitía en la frecuencia de los 550 kilociclos con 100 watts de potencia. Los horarios eran de 10 de la mañana a 2 de la tarde y de 6 de la tarde a 10 de la noche.
Muy pronto, “XEFC La Voz en Yucatán desde Mérida”, hizo populares muchos de sus programas como “la hora del teléfono libre”, “bajo el cielo de México”, “Sones y Danzones” y “Fiesta en mi pueblo”.
La “Trova”, la “Jarana” y muchos otros géneros musicales, se impulsaron desde el “Teatro estudio”, la “Sala de Grabaciones” y desde la “Cabina de Difusión” de la “XEFC, La Voz en Yucatán desde Mérida”.
El 3 de julio de 1960 Don Rafael Rivas Franco inaugura una nueva difusora la cual empieza una labor de expansión con una nueva emisora cuyas siglas XERRF y en la frecuencia de 1150 Khz “Radio Felicidad” se ubicó en el Edificio Luz, en la calle 62 entre 63 y 65, y posteriormente se traslada a la sede de la calle 64, donde también operaba la XEFC.
Una de las principales transmisiones que realizaba eran cápsulas noticiosas, cuyo principal objetivo era comunicarle a la audiencia los acontecimientos más importantes del momento, esto fue un éxito total para la audiencia.
Poco a poco se fue construyendo una sólida estructura, “Organización Radio Peninsular”, ahí se fueron agrupando las estaciones fundadas por Don Rafael Rivas Franco y las Radiodifusoras que con el tiempo fue adquiriendo su Hijo Don Luis Alberto Rivas Aguilar, que hoy conforman “Grupo Rivas”.
El sueño que comenzó en la cocina de una vieja casona del oriente de Mérida, culminó en una industria que ha fomentado cultura, tradición y comunicación durante décadas; llevando entretenimiento, información y lo más relevante es que fomenta día con día la expresión artística de la gran familia yucateca.
89 años de historia, gracias a el Fundador de la Estación pionera del sureste Rafael Rivas Franco.
“DIRÍASE QUE LA VIDA ES UN SUEÑO Y LOS SUEÑOS… RADIO SON”. Luis Alberto Rivas Aguilar.